miércoles, diciembre 28, 2005

Día para recordar...

- Ya, me voy a levantar porque tengo que ir a la escuela, hablamos después
- Bueno, cuídese y abrígese porque hace frío
- ¿En serio? ... (muevo un poco la cortina, veo que está maravillosamente nublado) ...que ricooo...gracias por avisarme...
Y salí...con chaleco puesto.
Me encantan los días como hoy, en que no hace ni mucho frío ni mucho calor.
¿Términos medios? Mmmm...no. Es otra cosa.
De repente un día de esos en que caen los patos asados (como tanto me gusta decir) y en que lo más anhelado es tirarse al agua...ñami, ñami...muy rico!!!, especialmente si logras darte un chapuzón.
De repente uno de esos días en que las temperaturas bajan del cero y hay que salir bien, bien abrigadito, ojalá con pantys de lana, y que provoca tomar a cada rato un cafecito, es exquisito.
Lo que me gustó de hoy es que fue uno de esos días que rompen los esquemas. Un día como hoy no debió haber existido en esta época del año. Pero existió, y trajo el aire fresco tan anhelado en días de tanto calor.
Al final lo que me gusta no es que las cosas sean extremas, sino que vayan variando.
Cada una de las estaciones del año me encantan. Pero cuando están terminando ya estoy un poquito aburrida, quiero que llegue la siguiente.
Soy muy feliz cuando en épocas de frío se entromete un día de calor.
O como pasó ahora, en época de calor se coló un día frío. Fue rico ver el cielo nublado, imaginarse el frío que esperaba afuera, ponerse chaleco, salir y sentir el viento en la cara.
Abrir un libro de Benedetti al azar, sólo esperando que hable la poesía...y siempre es así, dice lo que tiene que decir, da en el clavo con lo que está ocurriendo. Aquí está:

Piedritas en la ventana

De vez en cuando la alegría
tira piedritas contra mi ventana
quiere avisarme que está ahí esperando
pero hoy me siento calmo
casi diría ecuánime
voy a guardar la angustia en su escondite
y luego a tenderme cara al techo
que es una posición gallarda y cómoda
para filtrar noticias y creerlas

quién sabe dónde quedan mis próximas huellas
ni cuándo mi historia va a ser computada
quién sabe qué consejos voy a inventar aún
y qué atajo hallaré para no seguirlos

está bien no jugaré al desahucio
no tatuaré el recuerdo con olvidos
mucho queda por decir y callar
y también quedan uvas para llenar la boca

está bien me doy por persuadido
que la alegría no tire más piedritas
abriré la ventana
abriré la ventana

(Y mientras más la leo, más coincidencias encuentro)

(Y si usted es un lector atento y concentrado se dará cuenta de un detalle sobre la foto y este blog: es el mismo lugar, pero en otra fecha y en otras circunstancias. Puede ser interesante observar los contrastes)

(Dos frases para recordar: "lo que dije ese día era en serio"; "piénsalo bien, podrías darle alguna oportunidad". Y esto si que es raro, junto dos frases, dichas por distintas personas y sobre distintos temas...pero juntas arman otra cosa, sin ser esa la intención, quieren hacer creer que están hablando de lo mismo)